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Por decisión política en Bariloche congelaron tarifas del Cerro Catedral para impulsar el turismo invernal

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En un esfuerzo por asegurar una exitosa temporada invernal, el intendente de Bariloche, Walter Cortes, anunció que la tarifa para esquiar en el Cerro Catedral se ha congelado en $115.000 diarios. La medida busca atraer a un mayor número de turistas en un contexto de alta competencia regional.

En diálogo con FM DEL LAGO, Cortés enfatizó el compromiso de la comunidad local con el turismo. “Bariloche tiene su propia vida, sus instituciones, todos trabajando fuertemente para el turismo. Hay un fuerte espíritu en la ciudad donde desde el más chiquito hasta el más grande trabajan en conjunto para darle una buena estadía al turista, hacer promoción”, afirmó el intendente. Además del congelamiento de tarifas en el Cerro Catedral, se lograron reducciones en los precios de la gastronomía y el alojamiento.


Expectativas y desafíos para la temporada invernal

Respecto a las reservas para la próxima temporada, Cortes se mostró optimista, señalando que “julio y agosto vienen bien, septiembre bajó un poco”. La ciudad apuesta fuerte a la llegada de turistas brasileños, con 240 vuelos directos confirmados desde Brasil, sumado al flujo de visitantes de la costa argentina y Chile.

El intendente no dudó en criticar duramente a la empresa concesionaria del Cerro Catedral por la puja en torno a las tarifas. “La empresa no tiene que dialogar nada si el que fija las tarifas es el ente compuesto por empresarios, el ejecutivo y el legislativo. Ellos son quienes marcan el pase de la empresa, si por ellos fuera la empresa te llevaría la tarifa a $250.000”, sentenció Cortes. Subrayó que el problema de las concesiones de este tipo radica en la capacidad de la empresa para “manejar el turismo que viene a la ciudad”, lo que puede derivar en tarifas excesivas. “Acá te quieren cobrar $200.000 cuando en Chile esquías por $60.000, la gente busca la diferencia y busca precios”, agregó, haciendo hincapié en la necesidad de mantener la competitividad.

Cortés remarcó que, si bien La Hoya está bajo la misma empresa Trappa, el cerro Catedral “es del pueblo”. Insistió en que la empresa debe recordar que “la cara la ponen los intendentes cuando hay desocupación, cuando no hay turismo en la ciudad”. La concesión a 50 años fue calificada de “tremenda”, y el intendente advirtió que “el problema es cuando ponen tarifas muy altas porque el turismo no viene y uno se tiene que hacer cargo de la situación social”. La razonabilidad es clave, ya que “hoy en dos minutos la gente te cambia de destino, si hay nieve en Chile y es más barato se van para allá, para el extranjero somos caros, por eso hay que buscar el equilibrio”.


Peaje a camiones chilenos y el reclamo a la Nación

Consultado sobre las recientes declaraciones del gobernador Ignacio Torres acerca del cobro de peaje a los transportes chilenos por el deterioro de las rutas, Cortez respaldó la medida con firmeza. “Hay un tema de abuso sobre nuestras rutas, los chilenos saben que cada 45 kms paga peaje, sale salado y se paga el peaje porque se rompe la ruta y hay que arreglar”, explicó.

El intendente expresó su indignación ante la disparidad: “Una cosa que me causa como oscuro es que allá pagan y acá no quieren pagar nada”. Si bien existe un convenio de 1974 al que se aferran, Cortés argumenta que “ellos tienen que pagar porque te destruyen las rutas”. Lamentó que las rutas “se han hecho a la ligera” y que los camiones “hacen lo que se les da la gana, no pagan, no se sabe qué peso llevan”. Propuso el cobro de un peaje porque “no se puede seguir pagando con el erario argentino” el mantenimiento de rutas por donde pasan “más de 90 camiones diarios”.

Finalmente, Cortés lanzó un fuerte reclamo a la Nación por la falta de apoyo financiero. “Nación no manda nada”, aseveró, cuestionando la injusticia de que la región contribuya con impuestos nacionales sin recibir el apoyo necesario. Mencionó la eliminación de la ecotasa como un ejemplo de la difícil situación. “Hacemos lo que podemos, pero no alcanza, acá se junta el hambre con las ganas de comer, se rompen los caminos y nadie hace nada, ellos no hacen nada y el vecino sufre la rotura de sus autos, primero estamos nosotros”, concluyó el intendente, priorizando las necesidades de los barilochenses.