“No teniendo consultas y reservas, que es alarmante, el resultado de la temporada ya se puede predecir”
Compartir

La temporada invernal en Esquel se presenta con un panorama preocupante debido al bajo nivel de reservas, una situación que se suma a la ya compleja crisis económica. Así lo afirmó Carlos Scaglioni, un prestador turístico local, en declaraciones a FM DEL LAGO, destacando que “la temporada de invierno viene muy floja, no hay una variante respecto a años anteriores, no hay demanda, no hay reservas”.
Scaglioni enfatizó que esta realidad “se viene repitiendo hace un montón” y que, a diferencia de otros momentos del año como la temporada de tulipanes en octubre o noviembre, la cadena de valor turística para el invierno no logra activarse. “Las vacaciones que se planifican en invierno son diferentes, están los vuelos, los precios, no hay un circuito armado”, explicó, y agregó que “no teniendo consultas y reservas, que es alarmante, el resultado de la temporada ya se puede predecir, a diferencia de octubre que está colapsado”.
Un problema que trasciende la región: la necesidad de precios competitivos
La situación de escasez de reservas no es exclusiva de Esquel, según Scaglioni, quien señaló que es “extensivo a todos los destinos de nieve”. La única excepción que mencionó fue Ushuaia con Cerro Castor, donde se están ofreciendo “paquetes, servicios y alojamientos con importantes descuentos”. En contraste, en Bariloche, “hay una caja de resonancia y hay que salir agresivamente con los pases donde llaman al concesionario a que retrotraigan las tarifas al año pasado”.
Para Esquel, el prestador turístico diagnosticó que el problema radica en una “oferta sobredimensionada a la demanda que hay”. La solución, a su criterio, pasa por una estrategia integral: “Hay que aprender mirando, creo que acá algunos hacemos eso, pero hay que jugar con un todo, el cerro con precios competitivos, nosotros con descuentos agresivos, es un escenario diferente”. Sin embargo, advirtió que “la comercialización del destino no se hace solo con descuentos, estamos pidiendo pista con una turbina que no funciona”.
Certificación de destino: la clave para la prosperidad y la inclusión
En relación al destino de los 100 millones de pesos pagados a una consultora privada para un estudio del destino Esquel, Scaglioni defendió la iniciativa como un “cambio de paradigma” fundamental. Más allá de las cuestiones técnicas, destacó la importancia de “bajar un poco más a la tierra de la oportunidad que representa que alguien lo traduzca”.
El prestador turístico subrayó que este trabajo de certificación es una oportunidad para “coronar en prosperidad” años de esfuerzo y lucha en las instituciones. El objetivo es que “toda la sociedad tenga oportunidades reales con un crecimiento económico en la región, que se democratice la participación”. Scaglioni puso como ejemplo el éxito de la temporada de tulipanes, que considera “la prueba más correcta del impacto positivo, de un destino bien vendido, de restaurantes colapsados y de un comercio feliz”. En definitiva, se busca “la prosperidad, la inclusión, generar puestos de trabajo genuino”.
Scaglioni enfatizó la responsabilidad del ente mixto en el marketing y la promoción, destacando que el planteamiento de esta certificación “fomenta la participación de residentes en la toma de decisiones y en la formulación de políticas de estado”. Para él, “es la decisión que necesitamos, es la correcta y es la que buscamos durante tantísimos años”. Se trata de una oportunidad no solo para los actores del turismo, sino para “toda una sociedad que se empodere y que se amigue a este modelo”, buscando mejorar “la calidad del liderazgo y la gobernanza de estas organizaciones de gestión, de administración integral para un desarrollo sostenible de competir”.
El proceso de certificación tiene un presupuesto de 23.500 euros, más viáticos, y se extenderá por 13 meses. Incluirá un relevamiento, diagnóstico, propuesta de mejoras y planificación de procesos, con la participación de los sectores privado y público, así como la comunidad, algo que, según Scaglioni, “no ocurrió nunca”. La base operativa de esta etapa se encuentra en España.
Desafío para el nuevo director de turismo
Finalmente, Scaglioni se refirió a la reciente designación de Walter Torres al frente del área de turismo municipal. Si bien reconoció tener “casi nada de relación” con él, expresó sus deseos de éxito: “Espero que se sume y adhiera a esta bisagra que tenemos porque esta su oportunidad de formar parte de un nuevo paradigma”.
Para Scaglioni, después de “tanto esfuerzo de años, tanta malaria, tantos errores”, es momento de “corregir, trabajar y no mirar para atrás”. El prestador turístico confía en que Torres pueda aprovechar esta oportunidad para impulsar el desarrollo turístico de Esquel.