Fallo a favor de la extradición de Miguel Alejandro Vargas Nehuen por el femicidio de Ana Calfín

Un tribunal chileno de primera instancia ha emitido un fallo crucial a favor de la extradición de Miguel Alejandro Vargas Nehuen a Argentina. Esta decisión busca permitir la finalización de su enjuiciamiento por el femicidio de Ana Calfín, un caso que conmocionó a la provincia de Chubut. La defensa de Vargas Nehuen dispone de diez días para apelar esta resolución.

El traslado de Vargas Nehuen a Argentina solo podrá concretarse una vez que la sentencia de extradición quede firme. El tribunal chileno de primera instancia verificó que el prófugo de la justicia chubutense fue declarado penalmente responsable de un crimen en un juicio donde contó con defensa y estuvo presente en todo el debate. Estos elementos fueron determinantes para que el tribunal concluyera que el pedido de la justicia argentina es legal y debe ser respondido favorablemente.

Captura en Chile y coordinación internacional

A principios de mayo, Vargas Nehuen fue capturado en la comuna de Castro, en el archipiélago de Chiloé, Región de Los Lagos, al sur de Santiago de Chile. Su detención fue el resultado de un trabajo coordinado liderado por el Ministerio Público Fiscal del Chubut, en conjunto con la Brigada de Investigaciones de Esquel, Interpol y la Policía de Investigaciones de Chile.

En diálogo con FM DEL LAGO, la fiscal del caso, Dra. Rafaella Riccono, detalló: “Hay un fallo de primera instancia en la cual se concede la extradición solicitada por el estado argentino de Vargas Nehuen para que se realice la cesura de pena. Ahora debemos cumplir con los plazos procesales y ver si la justicia chilena recurre la sentencia o si queda firme. Puede ser recurrida ante la Corte Suprema de Justicia chilena”.

Riccono explicó que Vargas Nehuen “está con prisión preventiva que se dictó hace un tiempo, sigue cumpliendo esa medida hasta que sea extraditado”. Sobre su fuga, la fiscal indicó que el prófugo “llegó [a Chile] por medio de un transporte de alquiler hasta la frontera”. Destacó la complejidad del control fronterizo en Argentina, con más de 4000 kilómetros de extensión, y confirmó que Vargas Nehuen “pasó por un paso ilegal”.

La investigación que llevó a su captura fue ardua: “En Chile se hicieron diversas tareas de investigación hasta que se llegó hasta la isla de Chiloé, hasta la localidad de Castro, hizo un recorrido largo. La información que tenemos es que esta persona tenía familiares en Futaleufú, así es más sencillo el traslado de un lado a otro. Nosotros no podemos intervenir en Chile, de acá hacíamos determinadas tareas de investigación con las autoridades chilenas en terreno, así logramos ubicarlo, se logró la detención de esa forma”, relató la fiscal.

El proceso judicial y la pena de prisión perpetua

La fiscal Riccono aclaró que la sentencia de culpabilidad de Vargas Nehuen en Argentina aún no está firme, ya que la defensa tiene plazos para interponer recursos sobre la pena condenatoria. “Los plazos están suspendidos, pedimos la suspensión de los plazos procesales para continuar este proceso”, afirmó.

Respecto a la condena que enfrenta, Riccono fue contundente: “La pena que enfrenta hoy Vargas Nehuen es perpetua, es la más alta“. Asimismo, subrayó que la fuga del acusado no influye en la sentencia del femicidio: “La forma en que Vargas Nehuen se profugó de la justicia no es considerado, en el juicio estamos juzgando el homicidio de Ana Calfín, pero lo que pasó después no forma parte del juicio”.

Los tiempos para la extradición “dependen si se interponen o no los recursos en Chile. Hasta que no sepamos si se interponen recursos o no, no vamos a saber cuándo será trasladado”, explicó la fiscal. Riccono también aseguró que se mantienen en contacto regular con la familia de Ana Calfín, “siempre fueron informados sin tapujos y con las verdades que podemos entablar”.

Criterios de prisión domiciliaria y la ley de ejecución de la pena

Finalmente, la fiscal abordó el tema de la prisión domiciliaria, medida de la cual Vargas Nehuen se fugó. “La ley de ejecución de la pena establece las condiciones en las que una persona puede tener una prisión domiciliaria. Vargas Nehuen no tiene ninguna de las condiciones para que la pena sea cumplida con prisión domiciliaria, así que será cumplida en una cárcel común“, sentenció.

Riccono hizo una distinción fundamental: “La diferencia entre una persona condenada y otra investigada es fundamental. Para las personas condenadas rige la ley 24460, las personas condenadas que cumplen con ciertas características como una enfermedad, esas personas pueden tener una prisión domiciliaria, pero no se aplica para las personas investigadas que no tiene que ver con la ley 24460”. Concluyó que, si bien la fiscalía solicitó prisión preventiva en una cárcel común, “los jueces determinaron que él cumpla con la prisión domiciliaria. Las normativas del fundamento no podemos comparar o equiparar con una persona condenada y una  persona investigada”.