El intendente de El Maitén, Oscar Currilén, analizó los anuncios del gobernador Torres tras el aniversario del pueblo. Pidió pragmatismo ante la crisis, defendió la educación pública y adelantó detalles sobre el futuro manejo de La Trochita.
Tras el acto por el aniversario de El Maitén, el intendente Oscar Currilén brindó una entrevista a FM DEL LAGO donde dejó definiciones de fuerte contenido político y personal. Con un llamado a la unidad “espalda con espalda”, el mandatario local aceptó el desafío planteado por el gobernador Ignacio Torres de trabajar sin distinciones partidarias para superar la compleja situación económica de la provincia.
Un compromiso basado en la historia personal
Currilén se mostró particularmente sensible al hablar de la educación. Lejos de los discursos técnicos, el intendente vinculó su apoyo a las escuelas con su propia experiencia de vida. “Mi familia no tuvo recursos; yo entré al banco siendo canillita como ordenanza y mi hermana entró al municipio limpiando pisos. Por eso doy todo por la educación, para que los edificios estén acordes”, confesó, tras confirmar que le reclamó al Gobernador una nueva ambulancia y equipamiento para el hospital local.
El nuevo rol de La Trochita
Uno de los anuncios más importantes del aniversario fue el cambio en la administración del Viejo Expreso Patagónico. Currilén aclaró que la Provincia no se desprenderá de la unidad ejecutora, sino que se avanzará hacia una gestión compartida con los municipios.
• Administración local: El Maitén y Esquel (junto al intendente Taccetta) tendrán poder de decisión sobre el recurso.
• Sostenibilidad: El Gobierno Provincial continuará garantizando los sueldos y la estructura principal.
• Eficiencia: El objetivo es agilizar la operatividad, siguiendo el modelo de gestión aplicado en la infraestructura escolar.
Respeto por la democracia y ajuste necesario
Pese a su pertenencia al peronismo y haber acompañado a Juan Pablo Luque en las elecciones, Currilén fue tajante sobre el escenario nacional: “Hay que ser respetuosos de la gente que eligió un presidente. Milei sacó muy buenos votos y eso hay que aceptarlo”.
En esa línea, el intendente reconoció la necesidad de un ordenamiento en las cuentas públicas:
“Hay que sacarse la careta: los recursos son acotados. La recaudación viene en baja y la provincia recién hoy paga el aguinaldo. Yo no voté a Milei, pero había cosas que había que ajustar y cambiar”, sentenció.
Gestión de escasez: “Me enseñó la calle”
El jefe comunal detalló cómo aplica la austeridad en su localidad, mencionando que el gasto de combustible de la flota municipal asciende a 11 millones de pesos en pocos días, lo que lo obliga a ser “cauto y prolijo”.
“A mí me enseñó la calle. Hoy la prioridad es cómo pagamos la luz. No podemos exigirle a la gente que pague impuestos cuando están cortos de dinero”, explicó. Asimismo, advirtió que en Chubut no se puede realizar un “achique drástico” de la planta estatal debido a la falta de empleo en el sector privado, calificando el momento actual como un “proceso de aprendizaje para todos”.