La Municipalidad de Esquel concretó un cambio de guardia en la Subsecretaría de Inspecciones. El ingeniero Oscar Razzeto dejó la función, siendo reemplazado por Mario González, un trabajador de carrera que regresa de su jubilación para asumir la función.
González dialogó con FM DEL LAGO e hizo un repaso de los desafíos y objetivos para el área que ya conoce.
“Hace tres años que me jubilé, un día andaba con el caballo y [Austin, el intendente] me llamó si lo podía ir a ver. Fui y tenía la propuesta de si me quería hacer cargo del área,” relató González.
Refuerzo en Bromatología y Cuatro Áreas Clave
Al frente de Inspección General, González reorganizó el equipo, nombrando a Gabriela Montesino en la Coordinación General y reincorporando a Benjamín Lobos en la parte bromatológica.
El área de Inspección General municipal abarca cuatro pilares fundamentales, Bromatología, Comercio, Medio Ambiente y Obras Particulares.
El Desafío de la portada: “El embudo de Esquel”
Uno de los primeros focos de la nueva gestión es la puesta en valor y funcionamiento de la Portada, el puesto de control de ingreso a la ciudad, el cual estaba cerrado.
“Estamos con la Portada que es el embudo de Esquel. Necesitamos gente ahí, estamos limpiando para hacer los controles, estaba cerrado y es una pena, toda la mercadería que ingresa a Esquel entra por ahí,” afirmó González, señalando que el lugar presentaba problemas de higiene (ratas y demás), por lo que se está saneando.
El control en la Portada es fundamental para verificar: Carnes y Productos Faenados (evitando faena ilegal), Vendedores Ambulantes y Productos Alimenticios en general.
González enfatizó que, si bien la idea es hacer prevención, en épocas festivas el control es crucial, mencionando el “corderito clandestino” que suele ingresar, lo que demuestra la necesidad de un frigorífico en la zona.
El inspector: asesor y no invasivo
El Subsecretario cuenta con una dotación de 25 inspectores en todas las áreas. Señaló que está realizando ajustes en el personal según el perfil de inspección.
González busca cambiar la percepción del inspector municipal:
“El inspector es la cara de la Municipalidad, uno cuando va a hacer la inspección la persona se asusta, lo que pienso es que no es así, sino es para asesorar, informar y si no hace caso se lo infracciona.”
Aseguró que las inspecciones nunca se hacen en solitario, sino en binomio (acompañado por un experto como Benjamín Lobos en bromatología), evitando ir con “un batallón de inspectores porque es muy invasivo”.
Finalmente, respecto al problema de los vehículos abandonados (chatarra), González indicó que se hacen las actas y se envían al Tribunal de Faltas, sugiriendo que el proceso de levantamiento “no debería tardar tanto, sino que tendría que ser algo rápido”.
La oficina de Inspección General está ubicada en Chacabuco 55 en el Área Operativa, y González informó que está gestionando la asignación de dos líneas telefónicas, ya que por el momento no tienen un número oficial de contacto.